La paz Interna.

La paz Interna.

La paz interna de cada ser es capaz de lograr una paz externa. Cada cuerpo tiene su propio centro y al estar centrado, una serie de cambios son experimentados a nivel corporal, mental y espiritual.

Tienes que liberarte de tus cadenas para lograr la paz interna y la paz externa.

Tienes que revisar el origen de todo aquello que perturba tu ser y te saca de tu centro. Recuerda que tu centro te conecta con otro centro interno y ese es Dios. Eres parte de ese centro siempre.

Tu centro irradia un Aura, pero de paz interna y esta Aura invade el Aura de otras personas.

Uno mismo puede lograr activar que las otras personas deseen encontrar su centro al ser testigos de los cambios vividos por uno mismo.

Yo cambio y probablemente los demás cambiarán.

Para lograr el cambio hay que lograr darse cuenta de su realidad y ser consciente.

Identifica y reconoce tus cadenas.

¿Qué tan fuerte y gruesas son esas cadenas?

Entre más gruesas y fuertes sean éstas más trabajo se necesitará para liberarte de tus cadenas.

¿A qué te atas?

¿A quién te atas?

Identifica esos lazos que son cadenas que cargas. Estas cadenas pueden estar ligadas a personas que están vivas o muertas. Hay lazos energéticos invisibles que te ligan a los seres que han muerto en el pasado. Estos lazos o cadenas también son a eventos.

Los tres grandes enemigos del hombre son el ego, el apego y los miedos. Estos contribuyen a que las personas les cueste trabajo liberarse de sus cadenas. Lo que le duele en el alma y le hace crecer como ser humano.

Es hora de hacer EL TRABAJO DE LAS CADENAS y liberarse de ellas.

Y recuerda que después de la libertad, después de dejar esas cadenas, la paz vivirá en ti, dentro de ti.

Por: Juan Calos Machuca